Hace ya mucho tiempo que ando dándole vueltas a esta expresión y por una razón muy obvia, que en cuanto os la cuente vais a decir: Pues sí, es verdad, yo también lo he pensado mil veces.
Pues, ala, vamos al lio, sin más dilación y tranquilos que esto no va de tauromaquia.
Mi pensamiento de hoy es: En la vida todo se justifica, se sabe, se confirma, se entiende, pero a TORO PASADO. Pero en verdad todo tenemos que decidirlo a TORO PREVIO.
No fastidies. Todos sabemos hacer una “verónica” fuera de peligro. Pero lo que de verdad asusta en pensar si la haces o no cuando ves al toro empitonado venir hacia ti. El sudor frio te sale por cada poro y las mariposas del estómago se te han puesto de corbata. Tienes frio a treinta grados y dudas a tres mil por segundo.
La vida no tiene burladeros. Tu veras que haces.
#NecesitoInfoParaDecidir #AToroPrevioMeCago #QueFácilVerloAtoroPasado
Y es que todo en la vida lo decidimos sin la información necesaria. Ahí a lo loco. Salvajemente. Nos la jugamos al 50%.
Y si no acordaros de cuando estabais con catorce años pensando si trabajar o estudiar. Eligiendo carrera, estudios variopintos o si era mejor inglés que francés. ¿Qué? ¿Cómo elegiste? ¿Estabas segura? Pues no. Porqué te faltaba información de base para no cagarla. La mayoría elegimos (o eligieron por nosotros) un poco al tun-tun.
A voz de “a la niña parece que se le dan bien los números” o “la apuntamos a alguna carrera de humanidades que le gusta leer mucho”. A ver, estamos de acuerdo que esto como razones de peso, chirrían. Poco fundamento veo yo.
#MamáYoQueríaSerArtista #AhoraLoVeoClaro #SiAhoraAtoroPasado
O cuando estás finalista entre dos trabajos que te parece que los dos podrían funcionar y te duele la mano de hacer listas de pros y contras en cada servilleta, con cada copa, mientras la mente juega al escondite con tu razón.
¿Con cuál te quedas? Pues como cuando compras un melón. Te quedas con aquel que tiene rajitas amarillas y el culo blando y que parece que va a salir maduro y dulzón. Pero es imposible ver que el melón lleva un golpe y que solo abrirlo lo vas a tener que tirar.
Y si luego la cagas y te das cuenta que tu compañero es un tirano al día dos, empieza aquello de “yo tenía que haber decidido que…” y dale que te pego al tema de los remordimientos, que, por cierto, estos darían para un libro.
#NoMeLoPuedoCreer #EstaVezParecíaElBueno #LaHeVueltoaCagar
¿Y aquella “sucesión” de novios para toda la vida que tuviste? ¿En qué te basabas? “Déjalo tía, que parece un poco macarra”, te decían tus amigas. Ya. Pero a ti te molaba y aunque dudabas a cada rato, tú seguiste hasta que te la pego con la rubia del guardarropa de la discoteca de marras. Suerte que tuviste, porque si no acabas teniendo dos hijos con él y teniendo que verle el jeto como mínimo cada quince días.
Pero no. Elegiste bien y tienes un padrazo en casa y el mejor marido y compañero. Cuestión de suerte porque en realidad lo elegiste porque era al más alto y guapetón de aquella tarde en la disco. Una razón de peso muy obvia, claro.
#Confesémoslo #TodastenemosUnMaloteEnElCurrículum
Pues eso. Que cuando se vienen las decisiones, las importantes me refiero, las transcendentales, las que si no nos van a cambiar la vida nos van a mover un poco el escenario, falta información.
Unos deciden por intuición, otros por creencias, otros por prejuicios y en demasiados casos, cuando le preguntas a la sístole y dice “Si”, pero la diástole dice “No”, acaba desempatando el cerebro y claro eso nos trae más de comodidad que de felicidad.
Oye, ¡que ya! ¡que esto va así y no lo voy a cambiar yo! Que da igual si decides tomar sacarina o stevia en el café, o si salir a correr o a hacer piscinas, pero en lo grande, en lo gordo, en lo de si coger un tren a Cuenca o si vuelas a Australia, estás decidiendo sin muchas pautas.
#UnPocoDeIntuición #QuesiUnasPistas #LoMezcloTodoEnMiSombreroYLoQueSalgaTú
Reivindico la necesidad de esta expresión: Funcionamos todos a TORO PREVIO. Tirando de intuición. Buscando pistas y señales que nos indiquen. Vamos perdidos.
Y luego ya a TORO PASADO rectificamos y corregimos, si se puede claro. Porque la vida se escribe en bolígrafo y para borrar solo tenemos esa goma – que la generación del 70 recordareis – que sí, que borraba bolígrafo, pero que se cargaba la hoja también.
Así que ojito con rasgarse el corazón por no coger el toro por los cuernos. Ahí lo dejo. Feliz semana. Me alegro de que no seáis gente. Yo tampoco lo soy.
Que razón tienes, manual de pensar pero jaaaaaa, aúpa la philosophy