Hoy he ejercido de jubilada. Mejor aún, de tía jubilada. He ido a buscar a mi sobrina al colegio. Me he dado cuenta de que era la única mujer con tacones y el resto de las madres me han mirado un poco con cara de “¿y ésta loca?”.
Menos mal que mi sobrina ha salido como una energumena gritando: “tita, tita, tita” y el misterio ha quedado solucionado. Por su cara he visto que lo entendían de golpe. “¡Ah! No es su madre” es la frase que se ha dibujado en sus ojos.
¡Siiiiiiii! ¡Es mi tita!
Mi madre me esperaba en el coche y ya juntas las tres nos hemos ido al parque. Ni os cuento el relax mental que ha sido darle de comer a los patos.
Concretamente cuatro barras de pan que ha comprado mi madre. Casi una hora desmigajando baguettes. Hemos dejado a los patos con kilo y tres cuartos de más. Que esta noche no sé yo como van a ir de digestión.
Mamá ¡pásame otra barra de pan, please!
Luego hemos empleado otro rato es espantar palomas y hemos acabado finalmente en El Corte Inglés haciendo una comparativa sobre que garbanzos eran los mejores. Por supuesto hemos comprado doce cosas más que no necesitábamos. Pero es que, a falta de bares, no hay más diversión que ir al súper… ¡lo hemos dado todo por los pasillos!
Maravillosamente me ha sentado ésta desconexión modo jubileta sin stress. Me ha faltado mirar un par de obras y lo bordo. Pero dada la hora, ya no estaban en marcha.
¡Venga, venga! ¡Que nos falta éste pasillo, mamá! ¡Fiestaaaaa!
Y es que yo creo que no hay mujer “en la faz de la tierra” como suele decir mi padre que este aprovechando tanto el ERTE como servidora. No obstante, me he dado cuenta hoy, que debo dejarme más ratitos de estos de no hacer nada que requiera aplicar el más mínimo intelecto. Seguro que mi mente lo agradece.
Que ayer leí que hay cinco tipos de descanso: el físico, el mental, el emocional, el sensorial y el social. Ojo. ¡Cuidado! Si pensabas que con dormir lo tenías todo hecho.
Menos mal que madre, además de pan para los patos, ha venido con un tupper de albóndigas nivel familia numerosa. La cena está hecha. Tres pelotillas de esas y al sofá.
Buen finde preciosas, se viene Netflix.
Pobres patos 😭😭😭
Que va!! Si estaban como unas castañuelas!
Me has matado con lo de los cinco tipos de descanso, si a mí me cuesta hacer uno.
Pensé exactamente lo mismo cuando lo leí…jajajaja.