Lo sé, el título suena surrealista, pero no lo digo yo, lo dice la publicidad. Casi todos los anuncios de colonias o perfumes están ubicados en algún momento pre-revolcón, pre-vas-a-pillar o qué-bien-hueles-perdámonos.
¿Por qué no hay anuncios de colonia, ya no digo perfume, de una mujer antes de ir a la oficina? Porque sí, puedes ir a trabajar con un olor fresquito que haga agradable tu presencia sin molestar a nadie. Pero no. Eso no vende. En la oficina como si apestas.
¿Adónde fue a parar ‘Farala’? ¿Os acordáis?…”Tenemos chica nueva en la oficina y se llama Farala y es divina…lalalala”. Acabo de visualizar el anuncio, aquella muchachita entrando en el despacho y encandilando al personal con su olor. Santa inocencia de los 90.
Pues eso, que durante el día las colonias importan menos. Eso sí, cuidado con salir con nocturnidad y alevosía y sin perfume que igual hasta te multan.
Otra de las cosas que no entiendo es que todas – absolutamente todas – las mujeres que salen en televisión utilizando colonia sean modelos, actrices o, en su defecto, bellezones. Cuando anuncian lavavajillas utilizan gente más normal, guapa, fea y de todas clases. Está claro que o lavas platos o hueles bien, porque yo la segmentación la veo clara.
Si eres fea o del montón ni te preocupes, te compras una colonia con olor a lavanda y vas tirando para Villa Arriba (o Villa Abajo como prefieras) con un Fairy bajo el brazo, que hay platos para lavar. AH, se siente. Pues haber nacido guapa.
A mí me llegaría más si la llevara gente más de a pie. Que veo a Charlize Theron arrancándose la ropa mientras camina y con ese cuello cisne que tiene anunciando J’Adore de Dior (o asu antecesora que aún tenía el cuello más largo) y no lo veo. Yo que soy cuellicorta y de tipo regulero ni me lo planteo.
#esoesuncuelloylodemástonterías
Especial mención para el anuncio de ‘Blue Water’ de Dolce & Gabanna, en que aquello sugiere un final tórrido tórrido, en el que lo de menos, lo veo venir, va a ser la colonia.
Tipo maravillosamente esculpido en modo Dios griego esperando en barquichuela mientras la cámara enfoca sus santas partes enfundadas en bañador blanco.
Chica que sale del agua – casualmente con maquillaje impecable – sube a la barca su tipazo cubierto también con biquini blanco. Morreo al canto y…
#hastaaquipuedoleer.
Sí, sí. Muy realista el tema. Yo siempre que voy a la playa, me pongo perfume, ¿vosotras no?, y cuando salgo de nadar, ahí está, no ha desaparecido.
¿Es water-ressistance? Ja. No es creíble.
Yo cada vez que lo veo sólo pienso en volcar la barca, ahogar a la chica y agarrarme a semejante maromo #comosinohubieraunmañana. El perfume para los peces.
#sihepasadodeponerlaaella
Los de AXE fueron listos y golpearon al género masculino donde más le duele: en el ego. ¿Qué hombre no quiere ser una fiera irresistible que se las lleva de calle? Primero con el desodorante y más tarde con la colonia, lo de menos era el olor, aquello era sexo en frasco.
Obvio que son virtudes difíciles de demostrar o, dicho de otra manera: Mentira podrida. Si fuera real verías a los pavos vendiendo hasta su Ferrari para bañarse en Axe, que todos sabemos que tiran más dos tetas que cuatro ruedas dos carretas.
Aunque aún quedan honrosas excepciones, como mi compañero de trabajo – vale, es un poco especial – que se hace el su propio jabón y desodorante y dice que prefiere apestar a orgía turca antes que utilizar ese cutre producto que responde por Axe.
#elsueñodetodohombre #sexoenfrasco
El que más me gusta es el de Invictus de Paco Rabanne. Ese hombre trofeo al hombro, cruzando el campo de juego y llegando al vestuario donde le esperan seis diosas maravillosas. El mensaje es claro, Invictus te invita a una orgia. El anuncio deja claro el final: va a dejar el trofeo en un banco y se las va a merendar a todas.
Lo que yo te digo: que la colonia huele – y sugiere- sexo, más o menos adornado. Le agradezco a Rabanne que haya hecho el mismo anuncio, pero en femenino, en épocas de tanta distinción de género, al menos con esa colonia a la Diosa también la esperan unos cuantos efebos en el vestuario. Orgía pa’ti, orgia pa’mi. ¡Viva la igualdad!
Cierto es que la publicidad tiene que tener cierta magia, pero esta tiene más bien polvos mágicos. No obstante, si encontráis al de Invictus, ¡avisadme! #porquelodejotodo
A cada cual su …