Justo hoy hace un añito de mi primer post en este blog, así que, con vuestro permiso, me voy a permitir unos cuantos agradecimientos.
Primero y antes de nada, gracias a Agustín, compañero inseparable de eventos fashion reconvertido en amiguísimo-de-la-muerte que fue el que me animó a abrir este blog.
Gracias a mi madre por hacerme sentir realmente que yo no soy gente y por regalarme este nombre que es ‘muy nuestro’ y nos une a las dos.
Y miles de gracias a todos los que lunes tras lunes estáis “aquí”. Vuestras visitas me reconfortan y vuestros comentarios son la gasolina para seguir y aviso…¡Pienso seguir!
Porque está claro que mis historias surrealistas son en muchas ocasiones reflejo de las vuestras, porque la realidad se impone y porque este mundo necesita mucho humor…
¡Tenemos YONOSOYGENTE para rato!.
Os dejo el que fue mi primer POST, para que entendáis de verdad porqué… YONOSOYGENTE
Gracias, Gracias, Gracias #usIloveU
6 Abril, 2014
¡Bienvenidos a este blog que inauguro hoy! El único propósito del mismo es contar las aventuras y desventuras de esta vida que últimamente se ha convertido es un circo.
La verdad es que desde que llego esta famosa crisis, está visto que para quedarse, y se fueron “aquellos maravillosos años”, tengo la sensación de que muchas cosas han perdido “sentido”.
De hecho empiezo a sentir a menudo aquello de que “la realidad supera la ficción” y cual Bridget Jones, venida a menos, se suceden en mi vida historias caóticas, disparatadas y surrealistas a la par dignas de no ser creídas si no se han vivido.
Pero estoy de suerte porque yo…YO NO SOY GENTE. O eso me decía mi madre.
Yo creo que hay un manual secreto – cual Santo Grial – al que solo tienes acceso si eres madre (y no es mi caso) de “Frases celebres para instruir a tus hijos”, entre las cuales podemos encontrar joyas como: “Tomate el zumo enseguida que se le van las vitaminas” “porque lo digo yo y punto”, “no te pongas bizca que te vas a quedar así”…
Pero la favorita de mi madre, grabada en mi mente a fuego, por los años de los años y ya van siendo unos cuantos es: “Tu no eres gente”.
Esta respuesta valía tanto para “Mamá, las otras niñas se quedan hasta más tarde en la calle”, “Mamá, es que todas van a ir a la excursión,…”. La respuesta firme: “Deja que la gente haga lo que quiera, tu no eres gente”.
Con los años he aprendido a darle la vuelta a esta frase y a considerar que yo no soy cualquiera (lo que ha desarrollado, no os voy a engañar, cierto espíritu narcisista).
Ahí afuera por lo visto hay mucha gente, mucha gente en paro, mucha gente buscando trabajo, mucha gente con problemas de toda índole, pero claro: YO NO SOY GENTE, pero os aseguro que sufro, siento y vivo cómo si lo fuera.
Así que no se me ha ocurrido mejor nombre.
Así que si queréis seguir mis aventuras y desventuras, ¡por aquí nos vemos cada lunes! 🙂
Y hoy tenemos post en mi otro blog: Cuidatuimagen, AQUÍ