Dice mi marido que vivir conmigo es como vivir en el Tibidabo, pero en el Atalaya, tan pronto arriba como abajo. Yo le digo que vivir con él, pues lo mismo, como en el Tibidabo, pero en el avión ese que va dando vueltas y no hay ni que ponerse cinturón, sin riesgo de turbulencias, aunque sople un huracán. Bueno, igual, en ese caso…
Y es que la vida es así. Todos queremos lo que no tenemos.
Además, lo más importante de las relaciones es saber aceptar con quién andas. Es verdad que yo soy un poco como el Dragon Khan, que lo mismo subo 300 metros, que me dejo caer en picado, pero también hay días que hago unos ‘loopies’ fabulosos y ¡oye! Ahí está mi marido. ¡Para disfrutarlos conmigo!
Que dice que no puede. Que a veces se marea y que cualquier día lo mato de vértigo.
De verdad que es quejica. ¿Y yo? Yo voy todos los días en el ‘Tren de la Bruja’. Ahí girando por una vía segura, transitando los mismos raíles, confiándome. Pero escuchadme, que de vez en cuando el tipo me da un escobazo que me deja frita. Que es de los que las mata callando. Que es de los que cuando estás más tranquila te pega el susto de la muerte.
El caso es que yo creo que hay que aceptar que las relaciones son como la feria. Es absurdo pasearse sin comprar ticket porque entonces no hay oportunidades.
#ALaQueTeDespistasEscobazo
Tiene su riesgo claro, que igual tú querías una vida tipo ‘el saltamontes’ y resulta que luego el tipo te sale más rana. Querías endulzarla de algodón de azúcar y resulta que te salieron unas palomitas rancias.
¡Pues corriges y ya! Que la feria está llena de atracciones y tú te subes a la que más te gusta en cada momento. ¿Quién no se ha metido alguna vez en una relación tipo ‘El castillo del Terror’? Salir con el típico ‘fantasma’ que parece que no te vas a sacudir nunca. Menudo muerto.
Y como luego buscas todo lo contrario pues te tiras por el tobogán hinchable para caer encima de una piscina de bolas. ¡Oh! Felicidad extrema. Pero como somos como somos… pues también te cansas de ver bolas de colores todos los días.
#HastaLaFelicidadDeLasBolasDeColoresNosCansa
Y vuelta a empezar. Te buscas un ‘autos de choque’ porque al principio hace gracia. Porque os complementáis de lo diferentes que sois y luego choca que te choca todo el día y acabas hasta el hartazgo.
El tema es que es difícil estar toda la vida montada en la misma atracción. Al principio mueres de adrenalina, te ríes con cada salto y aún más con cada sobresalto. Con el tiempo ya sabes cuántos giros da aquel bicho y en qué momento sube y baja. A los años te conoces de memoria el engranaje y al final no te bajas de la atracción porque sabes que no te devuelven el ticket, pero ganas tendrías.
#ParenQueYoDeEstaAtracciónMeBajo
Lo suyo es que tú escogieras tu atracción favorita. Por ejemplo, el tren Disney y pasaras tus días dando vueltas y vueltas feliz en tu trayectoria mágica. Pero que a cada jueves te pudieras escapar al saltamontes a brincar un poco. Y cada dos semanas te dejaran darte un paseo en el Dragon Khan y aquí paz y después gloria. ¿O no?
Y vosotros ¿Cómo lo veis? ¿En qué atracción andáis subidos?
#YoNoSoyGente #YVosotrosTampoco #CadaUnoSeSubeALaAtracciónQueQuiere
Pues yo en el dragon Khan permanente, con momentos de saltamontes y de coches de choque y algo de tren de la bruja para despistar jaaa y rezando por el tren Disney. #maridosquevande0a100encerocoma #yomebajodelavidaquenotengoedadparatantosobresalto #i´mtoooldforthisshit 😉
Jajajaja. No me seas loca. ¿no hay momentos Disney? Si me creo todo lo que me cuentas es que tu Sargento tiene más rango que el mío. Jajajaja.
Lo del tren de la bruja es lo peor #TeDespistasYTomaEscobazo
mi ultima relación ha sido creo que una especie de Montaña rusa pero mezclada, entre virtual, mecánica, acuática y demás jajaja, sube y bajas, vueltas de cabeza, subida tranquila de esas que te pega la brisa en la cara llegas arriba miras un paisaje hermoso… PARA LUEGO CAER EN PICADA Y GRITAR jajaja, ha sido diversión pero era hora de bajar de esa atracción. Saludos!
Bueno Allen, la buena noticia es que hay un montón de atracciones. Si ya te cansaste de esta montaña rusa igual es hora de darse una vuelta en los caballitos… jajajaja. Besazos.